Editorial Hormiguero

La fitoterapia

Fitoterapia es el nombre científico dado a la medicina naturista para tratar enfermedades mediante el uso de sustancias vegetales que producen y acumulan en su organismo algunas sustancias químicas conocidas como “principios activos”, que son beneficiosas para curar enfermedades del hombre y de otros seres vivos. Es un arte milenario que tiene sus propios métodos y reglas. Posee muchos seguidores, quizás aún más en estos tiempos de crisis, pero también tiene sus detractores.

La Fitoterapia tiene muchos beneficios:

• Los remedios son fáciles de conseguir

 • Su efecto no tiene consecuencias adversas tan graves como la medicina industrial.

• Son gratuitos o los podemos comprar o cultivar a muy bajo costo.

• Muchas son empleadas en la cocina como condimento o base de algunas comidas.

• Aportan energía solar, sobre todo cuando son frescas o deshidratadas al sol.

El  empleo de flores, raíces, hojas y tallos  puede ser en forma de infusión, jugo, baño, cataplasma, tinturas, lociones, ungüento, gárgaras, inhalaciones y enemas. Mientras sus virtudes medicinales permiten una clasificación, una gran mayoría posee múltiples propiedades y por tanto figuran en más de un grupo; así, tenemos plantas para:

  • El sistema digestivo y metabólico, que incluyen antiácidas, antiespasmódicas, laxantes, antiflatulentas, antiulcerosas, antidiarreicas, entre otras.
  • El corazón, sistema circulatorio y sangre: entre las que hay estimulantes, hipotensoras, antihemorrágicas y antianémicas.
  • Para la piel: bien sea como cicatrizante y antiséptica, y como cosmética por sus propiedades humectantes, emolientes o astringentes.
  • Para el sistema urinario y genital, pues sirven como diurético, desinfectante, estimulante y antiespasmódico menstrual.
  • Para aparato músculo-esquelético, como antiinflamatorios y antirreumáticos.
  • Enfermedades respiratorias, por sus efectos antitusígenos y expectorantes.
  • Otras enfermedades de tipo infeccioso, nervioso o doloroso, considerando su potencial como antipirético, tranquilizante, analgésico, antiparasitario, antibacterial, antiviral, y otros

A pesar de su popularidad y efectos beneficiosos, algunas hierbas pueden interactuar con otros medicamentos o ser tóxicas en dosis altas y, en muchos casos, no sustituyen al fármaco elaborado comercialmente. También, pueden causar efectos secundarios e incluso podrían resultar alérgicas, así que es mejor no exceder en su consumo, conocer bien la planta a utilizar (puede recibir diferentes nombres según la región), su procedencia y el uso adecuado para la forma de preparación y conservación. Finalmente, es necesario recordar que aunque esta medicina ayuda mucho, siempre es bueno ir al médico y confirmar un diagnóstico.

Referente: Cáceres, M. (s/f). Manual de Uso de Hierbas Medicinales del Paraguay. Recuperado el 20 de abril de 2021  de: http://portal.unesco.org/en/file_download.php/c9010dd7f603adeb359ff68830c3c978hierbasmedicinales.pdf

Autora: Thamar Ortigoza

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