Editorial Hormiguero

¿Geoingeniería o reducción de CO2?

El cambio climático es una de las mayores amenazas ambientales a las cuales se enfrenta la humanidad. ¿Y qué ha hecho el hombre para frenar esta variación global del clima de la Tierra? Hoy te dejamos un breve artículo sobre cómo las sociedades han desarrollado maneras para minimizar la cantidad de luz solar que llega a nuestro planeta, usando la Geoingeniería o reduciendo las emisiones de CO2.

La Geoingeniería se desarrolló en los países más avanzados tecnológicamente, causantes de emitir los más altos niveles de CO2 a nivel mundial, ya que se presume es una respuesta eficaz para combatir el cambio climático por el cual está atravesando nuestro planeta. La Geoingeniería es la alteración del clima a “beneficio del hombre”, se trata entre otras cosas de: minimizar la cantidad de luz solar que llega a nuestro planeta, alterando químicamente las nubes para que sean más blancas y puedan reflejar la luz solar hacia el espacio; colocar aerosoles en la estratosfera de compuestos sulfúricos; añadir grandes cantidades de nutrientes en el mar, para así hacer crecer el fitoplancton que mediante la fotosíntesis extraen el CO2 atmosférico y al morir estos organismos se llevarían el CO2 al fondo del mar. El objetivo sería minimizar la temperatura de la tierra rápidamente.

Pero la realidad de esta solución es que no se sabrá con exactitud cuáles serán las consecuencias de esta “alteración del clima”, pues el hombre nunca ha logrado dominar la naturaleza y después que se hayan realizado estos experimentos no habrá marcha atrás.

Para el resto del mundo el único medio que logrará salvar nuestro planeta será reducir o en el mejor de los casos, terminar con las emisiones de CO2, ya que este es el principal causante del calentamiento global. En la 15° Conferencia de Cambio Climático de la ONU en Copenhague 2009, el para entonces Presidente de la República Bolivariana de Venezuela Hugo Chávez, habló sobre la importancia de la conservación ambiental y afirmó que la única manera de combatir el cambio climático, era cambiando la forma en cómo hacíamos uso de los combustibles fósiles, y que además debíamos luchar contra ese capitalismo salvaje que está acabando con la vida y los recurso de nuestro planeta solo para el beneficio de unos pocos.

Recordemos entonces, aquella frase que se escuchó en las calles de Copenhague durante esa cumbre:

La realidad es que el cambio climático ya está afectando la vida en nuestro planeta, diariamente se emiten millones de toneladas de CO2 a la atmósfera, la cual sigue reteniendo los rayos del sol, y por consiguiente, sigue  aumentando la temperatura de la tierra.

Hasta ahora, las acciones tomadas por las personas no son suficientes, la humanidad debe trabajar aún más para luchar contra este cambio climático causado por nosotros mismos; en nuestras manos está el poder salvar nuestro planeta, y así poder dejar a la posteridad un mundo en el que puedan vivir disfrutando de las bellezas y riquezas naturales.

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